¿El Tratado de Alta Mar vulnera la soberanía marítima del Perú?

El Tratado de Alta Mar SI vulneraría la soberanía maritima del Perú. Pero, quedarse fuera, afectaría de igual forma nuestra soberanía.

En las últimas horas ha sido noticia el tratado de altamar firmado por la presidente Dina Boluarte en Francia. Esto ha generado alarma en el Perú, por cuanto algunos consideran que firmar este tratado podría vulnerar la soberanía del mar peruano. Pero, ¿qué tan cierto es esto?, ¿hasta qué punto este tratado podría vulnerar nuestra soberanía marítima? ¿Nos perjudica más quedar fuera del tratado que tener decisiones en él? Hoy en Mente Jurídica hacemos un análisis breve.

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Tratado de Alta Mar firmado por Dina Boluarte en Francia, vulneraría la soberanía marítima.

¿Qué es el Tratado de Alta Mar?

Este tratado es formalmente conocido como Acuerdo sobre la Conservación y el Uso Sostenible de la Diversidad Biológica Marina de las Zonas situadas fuera de la Jurisdicción Nacional, o BBNJ, por sus siglas en inglés (Biodiversity Beyond National Jurisdiction), pero para efecto de este artículo lo llamaremos el Tratado de Alta Mar.

Sus objetivos principales, al menos hasta ahora, son: (i) conservación de la biodiversidad marina en áreas internacionales, (ii) regulación de recursos genéticos marinos, (iii) evaluaciones de impacto ambiental en la altamar, y, (iv) transferencia de tecnología marina y creación de capacidades en países en desarrollo.

Dicho tratado fue aprobado por consenso el año 2023 en el marco de la ONU, pero ya tenía casi dos décadas de negociaciones previas. Su objetivo primigenio es regular actividades humanas en la altamar, lo que conocemos mundialmente como aguas internacionales, es decir, territorio marítimo que no está sujeto a la jurisdicción de ningún país, consideradas como dominio público internacional.

Sabiendo esto, vamos entendiendo que este tratado -al menos en lo que expresa- parecería no afectar al territorio marítimo peruano, pero ampliemos el análisis y veremos como va cambiando todo.

¿El Tratado de Alta Mar vulnera la soberanía marítima?

Para saber ello, primero debemos conocer, y el conflicto existente entre la ONU y Perú respecto a la soberanía marítima.

El Decreto Supremo N.º 781 del año 1947, establece la soberanía y jurisdicción del Perú sobre 200 millas maritimas. Asimismo, existe la "Declaración de Santiago sobre Zona Marítima" del año 1952, un tratado tripartito firmado por Chile, Perú y Ecuador, que establece la soberanía y jurisdicción de cada país sobre una zona de 200 millas náuticas desde sus costas.

Sin embargo, la ONU, considera que Perú tiene derecho al mar territorial que equivale hasta solo a 12 millas náuticas desde la costa, y que solo en esas 12 millas, Perú tiene soberanía total, como si fuera territorio terrestre.

Aunado a ello, la misma ONU, reconoce la existencia de una Zona Económica Exclusiva (ZEE), que amplia este territorio marítimo hasta 200 millas náuticas desde la línea de base, donde, para ellos, Perú no tiene soberanía plena, pero sí tiene derechos soberanos sobre los recursos naturales (pesca, petróleo, etc.) y ciertas facultades de control ambiental, investigación y regulación económica.

Cabe resaltar, que Perú, al no estar de acuerdo con la ONU, no ratificó este tratado que solo reconocía 12 millas soberanas y 200 como Zona Económica Exclusiva. Pero, aun cuando no lo ha firmado, ya es derecho internacional -por costumbre- aceptado globalmente que Perú ejercerse soberanía parcial sobre dicha zona.

Eso es importante comprender, pues de ahí viene la controversia por firmar este tratado de Alta Mar, ya que, este sería un instrumento de aplicación o acuerdo de implementación de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR), esa misma que solo reconoce 12 millas completamente soberanas al Perú, y las amplia a 200 millas por ZEE.

Pero, esto no es solo para Perú, en realidad para la ONU, todos los países del mundo solo ejercen soberanía absoluta sobre las 12 millas.

Artículo 2°, CONVEMAR.
“La soberanía del Estado ribereño se extiende más allá de su territorio y aguas interiores a una franja de mar adyacente denominada mar territorial. Esta soberanía se extiende al espacio aéreo, al lecho y al subsuelo del mar territorial.”

Artículo 3°, CONVEMAR.
"Todo Estado tiene derecho a establecer la anchura de su mar territorial hasta un límite que no exceda de 12 millas marinas, medidas a partir de líneas de base determinadas de conformidad con esta Convención."

La cuestión, aquí es, como Dina Boluarte presidente del Perú, firmas un tratado que está directamente ligado al CONVEMAR, la cual, solo reconoce 12 millas marítimas soberanas al Perú, y no 200 millas soberanas como expresa nuestra Constitución Política, el Decreto Supremo N.º 781 del año 1947 y la Declaración de Santiago sobre Zona Marítima del 1952.

Entonces,

¿Vulnera la soberanía marítima de Perú o no?

Sí, jurídicamente hablando, firmar y ratificar el Tratado de Alta Mar implicaría una aceptación implícita del marco legal de la CONVEMAR, el cual establece que la soberanía plena del todo Estado ribereño se limita a 12 millas náuticas (mar territorial) como vimos en los artículos citas anteriormente.

La vertiente más aceptada, aduce que ratificar el Tratado de Alta Mar equivale a aceptar de forma indirecta que solo tenemos 12 millas, ya que, si bien este nuevo tratado no redefine zonas marítimas, como acuerdo de aplicación de la CONVEMAR, implica aceptar el marco jurídico que esta conlleva.

Por lo tanto, al firmar dicho tratado, Perú estaría apartándose de su posición histórica, y aceptando un régimen internacional que limita su soberanía a 12 millas.

¿Cómo nos afecta no ser parte del Tratado de Alta Mar?

El tratado de alta mar busca proteger aguas internacionales que se consideran de dominio público internacional, las cuales están ubicadas más allá de las 200 millas náuticas, es decir más allá de las 200 millas que abarcan nuestra Zona Económica Exclusiva (ZEE).

Por lo tanto, este tratado NO va a tomar decisiones dentro de las 200 millas de mar peruano, pero sí introduce nuevos mecanismos multilaterales que podrían influir en la forma en que Perú participa en actividades fuera de su jurisdicción marítima, particularmente en aguas internacionales.

Recordemos que la Constitución Política del Perú de 1993 establece claramente los límites de la soberanía y jurisdicción del Estado peruano sobre el mar:

En el Artículo 54° prescribe:
“El territorio del Estado comprende el suelo, el subsuelo, el dominio marítimo y el espacio aéreo que los cubre. El dominio marítimo del Estado comprende el mar adyacente a sus costas, así como su lecho y subsuelo hasta una distancia de doscientas millas marinas, medidas desde las líneas de base establecidas por ley.”

“Dentro de su dominio marítimo, el Estado ejerce soberanía y jurisdicción sin perjuicio de las libertades de comunicación internacional, conforme al derecho y a los tratados internacionales ratificados por el Estado.”
En resumen, Perú ejerce soberanía hasta las 200 millas náuticas de su costa. Más allá de ese límite, no existe soberanía peruana, sino solo derechos que se ejercen conforme a tratados internacionales.

Ahora, si vamos por la vertiente de que este tratado no vulnerará la soberanía marítima nacional, podemos analizar esto desde una perspectiva estratégica, y plantearnos una pregunta clave.

¿Cómo nos perjudica quedar fuera del Tratado de Alta Mar?

El tratado de alta mar no va a efectuar cambios, ni se invadirán nuestras 200 millas marítimas, pero debemos tener en cuenta que, a partir de que países como Chile, Ecuador y vecinos cercanos lo ratifiquen, ellos podrán ser parte de las decisiones que se tomen en dicho tratado.

Recordemos que, ambos países, tanto Ecuador como Chile, firmaron el tratado tripartito con Perú donde los tres acordaban el reconocimiento de las 200 millas soberanas de cada país. Sin embargo, más adelante se adhirieron y ratificaron ser parte de la CONVEMAR, por lo tanto, aceptaron que solo tienen 12 millas con soberanía plena y 200 por la ZEE.

La pregunta es, ¿Queremos que países vecinos que sí ratificarán este tratado tengan poder de decisión sobre aguas internacionales y nosotros no? aun cuando son países con los que hemos tenido conflictos bélicos.

Eso nos lleva a tener en cuenta que, de no firmar, Perú se pone en cierto riesgo, y aquí empezamos a hablar más de un tema geopolítico y derecho internacional.

Intentaremos nombrar algunos posibles riesgos a los que nos enfrentaríamos y usted analiza que tan perjudicial puede o no ser para el país.

¿Qué riesgos enfrenta el Perú si no se adhiere al Tratado de Alta Mar?

Primero, la pérdida de poder de decisión en gobernanza oceánica internacional: la ratificación del Tratado de Alta Mar otorga a los Estados parte el derecho a participar y votar respecto a la creación de áreas marinas protegidas en altamar, aprobación de evaluaciones de impacto ambiental en aguas internacionales, y regulación del acceso y distribución de beneficios por recursos genéticos marinos.

Si Perú no se adhiere al tratado, no vota. Por lo tanto, países vecinos como Chile y Ecuador (por mencionar a los más cercanos) que sí lo ratifiquen podrán impulsar intereses propios sobre las zonas adyacentes a la región del Pacífico Sur, nosotros, no.

Segundo, el Perú sufriría un aislamiento diplomático regional: esto porque los países firmantes formarán una coalición que decidirá sobre uso y regulaciones en aguas internacionales, aislando a Perú de consensos regionales sobre conservación marina en altamar. Terminaremos siendo un espectador respecto a decisiones en aguas internacionales.

Tercero, vulnerabilidad frente a decisiones unilaterales: al quedar fuera del tratado no tendremos -en peruano- NI VOZ NI VOTO, sino que nos exponemos a:
  • Que se establezcan áreas protegidas en aguas internacionales frente a nuestras 200 millas de mar peruano, sin poder tener toma de decisión.
  • Como ya se ha venido hablando, que las rutas migratorias de peces, ballenas o tiburones que cruzan entre el mar peruano y aguas internacionales queden sujetas a regulaciones de los firmantes del tratado, y nosotros como espectadores.
  • Que se empiece a condicionar (por decisiones ajenas) a proyectos o flotas peruanas que operen más allá de las 200 millas.
Es decir, los otros países firmantes podrían determinar indirectamente cómo y dónde Perú puede operar en alta mar, esto sería perjudicial. Es importante, más aún ahora que estamos intentando ser un referente en el comercio marítimo.

Por lo tanto, lo más lógico es que, si Perú quiere ejercer influencia más allá de las 200 millas, debe adherirse al Tratado de Alta Mar.

¿Qué riesgos enfrenta el Perú si se adhiere al Tratado de Alta Mar?

Desde una óptica más crítica y soberanista, nuestro país debería vigilar de forma rigurosa las decisiones multilaterales que se tomen sobre aguas internacionales frente a nuestro territorio, pues podrían terminar condicionando indirectamente su autonomía sobre las 200 millas.

Por ejemplo:

Si se establecen áreas protegidas adyacentes a la ZEE peruana, podrían surgir conflictos ecológicos, pesqueros o de evaluación de impacto que involucren a Perú.

Esto me deja pensando, pues el Sr. Felipe James, presidente de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), indicó a RPP, que empresas pesqueras han manifestado su preocupación sobre el acuerdo, ya que operan fuera de las 200 millas. Aquí pregunto nuevamente, ¿es mejor ser parte en las decisiones que se tomen o ser un espectador?

Otros ejemplos:

Si se impone un estándar ambiental muy alto para actividades en altamar (como parece que será), puede haber efectos indirectos sobre la actividad pesquera que hoy opera cercana al límite de las 200 millas, peor aun sabiendo que países europeos más desarrollados tendrán poder de decisión, siendo una vertiente muy ambientalista, pudiendo generar presión en países subdesarrollados, no preparados.

Los gastos que conllevan firmar el tratado serían otro problema, ya que significa asumir obligaciones técnicas, logísticas y financieras. Las evaluaciones de impacto ambiental, seguimiento de los proyectos en altamar, entre otros, tendrían que salir del bolsillo de todos los peruanos.

Y claro, lo importante, sí Perú se adhiere al Tratado de Alta Mar, los riesgos no son menores, especialmente porque este nuevo tratado es un instrumento “de aplicación” o vinculado directamente a la CONVEMAR, lo que puede tener implicancias indirectas de aceptación normativa, podría entenderse que el Perú acepta tácitamente su estructura jurídica, incluida la noción de que la soberanía plena llega solo hasta las 12 millas.

¿Capricho o soberanía real?  

El Perú nunca ha ejercido soberanía real sobre las 200 millas como pretende, tal como lo analiza y explica Hugox Chugox en el vídeo antes mostrado.

Si todos los países con salida al mar aceptan tener 12 millas de mar territorial más las 200 de Zona Económica Exclusiva —incluidos nuestros vecinos como Chile y Ecuador, e incluso Estados Unidos mediante el derecho internacional consuetudinario—, ¿será que nuestra posición es solo un mero capricho?

Los países en América que hasta hace algunos años tenían la misma postura que el Perú terminaron ratificando la CONVEMAR. Es para ponernos a pensar.

Abg. Jimmy Chiroque Balarezo

Sobre el autor

Abogado asesor jurídico en temas administrativos y municipales, con enfoque explicativo y resolutivo en la interpretación de leyes, regulaciones, resoluciones y otros.
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